Este verano por algún motivo o por otro cualquiera he necesitado leer libros como yo los llamo light, ese tipo de libro sencillo, de lectura fácil y rápida que no obliga a implicarte emocionalmente con personajes desgraciados y sí te adentra en un mundo divertido y ameno gracias al cual tu propia vida parece un poco más liviana. Y con estas necesidades descubrí a Laura Norton. Me fijé en ella por la alegre y colorida portada de Gente que viene y bah y después de investigar un poco y de ver que tenía otro libro con un título que me saca una sonrisa cada vez que pienso en él (No culpes al karma... de lo que te pasa por gilipollas, es el mejor título que he escuchado en toda mi vida lectora). Después de leer las sinopsis de ambas historias me decanté por Gente que viene y bah para comenzar y quedé tan sorprendida y enamorada de la forma de escribir de Norton que no pude si no correr a comprar y devorar No culpes al Karma. Sin embargo y siendo fiel al orden de publicación he decidido reseñar en orden inverso al que los leí, espero que os guste:
Laura Norton
Editorial: Espasa
Páginas: 352
No culpes al karma nos cuenta la historia de Sara una joven un poco perdida en la vida (profesionalmente hablando) en su relación (lleva un año sin ver a su novio Roberto) y en su familia (un tanto excéntrica). Sin embargo, su mundo dará un giro de 180 grados cuando su hermana, el novio de esta, su padre (recien separado de su madre) y su propio novio invaden su casa y su vida en un momento crucial de su carrera.
La historia de Sara tiene un halo romántico que hace que nos impliquemos con ella, deja unas oposiciones para centrarse en su verdadera pasión, ser plumista, se instala en el taller y en el piso de su abuela que también era plumista y lucha por sacar adelante su pasión. Una pasión que ha arraigado en ella gracias a Aarón su primer amor platónico del instituto y que como todo en la vida vuelve justo en el momento menos inoportuno convertido en el novio y futuro marido de su hermana. En este entorno hostil Sara debe sacar a delante su carrera, ser el apoyo de una familia recientemente desestructurada de un día para otro, lidiar con el extraño comportamiento de su novio y mantener cierto tira y afloja con sus sentimientos hacia su "cuñado".
Debo decir que después de haber leído Gente que viene y bah, No culpes al Karma me ha parecido más light. Los personajes y algunas situaciones son extremas, todos los personajes están llevados a los límites sin perder su encanto, pero nada comparado con la segunda novela de Norton. Sin embargo también es cierto que esta historia tiene todo ese halo romántico envuelto en plumas, un amor imposible, conversaciones cómplices, dos artistas... que hacen que todo se lea con mucha facilidad y que resulte imposible soltar el libro hasta llegar a su última página.
Otro plus es la documentación de libro, creo que aprender lo suficiente como para explicar la profesión de plumista de una forma tan visual y acertada no debe ser fácil. Además de otros lugares en los que se desarrolla la trama que no voy a desvelar para no hacer spoiler.
Creo que lo que más me gusta de Laura Norton, es la sencillez con la que escribe, lo fácil que le resulta que sus personajes se metan en situaciones totalmente disparatadas, los diálogos chisposos que te hacen soltar más de una carcajada y que las historias más simples del mundo se te queden grabadas en la memoria. No debemos aspirar a grandes giros del argumento, ni a personajes con dobles intenciones o a momentos trascendentales, para eso ya está nuestra propia vida, Leer los libros de Norton hace que podamos salir de nuestro caótico mundo para entrar de lleno en historias plenas de luz y color, de risas y de momentos especiales.
Sin duda los recomiendo, además ya se está rodando la película de esta historia. Espero que mi reseña os haya gustado y que os animéis a leerlo. Dentro de unos días os dejo la reseña de Gente que viene y bah.
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